Extremadura, cuenta con cerca de sus trescientas mil hectáreas de olivar (283.416 ha), repartidas por casi toda la extensión de su territorio, lo que implica que el olivar forma parte tanto de su desarrollo económico como histórico, cultural, y social
En la Sierra de Gata, una comarca extremeña situada al noreste de la comunidad limitando al oeste con Portugal, confluyen numerosos olivos formando un paisaje muy peculiar, ya que un porcentaje importante de este olivar se encuentra dispuesto en bancales construidos siglos atrás para disponer de terrenos cultivables en los terrenos de las laderas abruptas de la Sierra.
En torno a los pueblos, donde las tierras son ricas en humus, los olivos se entremezclan con terrenos dedicados a los huertos y frutales, en los lechos de los arroyos y ríos ocupados por los prados de regadío con castaños y nogales, rodeados de vegetación natural se simultanean los olivares.
En los valles de las Ribera de Acebo, a los pies del pico mas alto de esta serranía, El Jalama, se entremezclan importantes mosaicos formados por naranjos, robles, castaños y lo que no puede faltar en esta comarca, olivares.
Conformando de esta manera, el mosaico olivar-pinar-robledal-matorral que sin duda aporta un alto valor agronómico, ecológico, paisajístico, cultural y social a esta comarca.
Prueba de este incalculable valor natural reside en la localización de uno de los centros budistas del país, el olivar de buda, ubicado en esta comarca, en las faldas del monte Jalama, que representa un refugio de espiritualidad, silencio y contemplación para la practica del Budismo, y donde su fundador, Philipe Camus, donó sus fincas para la construcción del centro. Arquitecto y constructor adinerado francés que lo dejó todo para viajar a la India, donde gracias a un lama tibetano logró reencontrarse y redirigir su vida mediante la meditación hacia un amplio desarrollo personal. En búsqueda de su particular paraíso, donde poder desarrollarse y divulgar todo lo aprendido, Philipe encontró en Extrermadura, en esta mágica serranía de mosaicos de olivares, el lugar perfecto donde alma y cuerpo se unen para el crecimiento personal y donde los sueños son increíbles.