Actualmente se produce aceite de oliva en un total de 56 países de los 5 continentes, ostentando un total de 11,3 millones de hectáreas de superficie cultivada de olivos. La producción potencial global de dicha extensión, dándose todas las propicias circunstancias climáticas y edafológicas, podría alcanzar los 4,5 millones de toneladas, mientras que el consumo, que ya se extiende por más de 170 países, y de acuerdo con el mismo cálculo, podría llegar a suponer los 3,5 millones de toneladas, lo que arrojaría excedentes de 1 millón de toneladas teóricas nominales, por campaña.