Esta es una de las conclusiones a las que ha llegado un análisis realizado en el seno del Máster de Administración y Dirección de Empresas Oleícolas de la UJA, en el que han participado Juan Carlos Marín, responsable de ultramarinos en Grupo Alcampo, Centro de Linares y profesor del citado máster, y Juan Vilar, consultor estratégico y codirector del programa.
El estudio desvela que cuando se crea una zona, un ámbito especialmente adecuado, acotado y dispuesto en lo referente a una categoría, es este caso, todos los aceites de oliva disponibles en el punto de venta, se prescribe el producto, y se destinan recursos a explicar, y exponer las características de cada una de las categorías o productos disponibles, se eleva el margen de venta, y la rotación del producto.
El estudio se ha llevado a cabo en un centro cuya afluencia diaria real es de más de 3 mil personas, el entorno real es de 145 mil usuarios y 51 mil hogares, en cuanto a la gama de aceites de oliva son casi 650, teniendo en cuenta la combinación de 53 marcas (18 locales) y 12 formatos distintos para cada una. El producto en todo caso está aislado por la categoría mencionada en el centro, y en cada caso se explica, y expone la procedencia, ciertas referencias históricas del productor, modo de cultivo, entre otra información disponible. El análisis se ha llevado cabo durante los 8 primeros meses de 2022.
El resultado, es que el usuario está dispuesto a pagar hasta un 5,5 por ciento más, adquiriendo un 18 por ciento más de producto, comparado con el entorno global objeto de estudio (aproximadamente el 3,5 por ciento de la superficie, y casi 4 en volumen, de los supermercados e hipermercados españoles), en este caso para la categoría aceite de oliva virgen extra, si nos referimos a la categoría de aceites de alta gama o premium, la situación mejora 13 puntos porcentuales en rotación, y más de 5 en margen.
Por lo tanto, se concluye con que la venta mediante prescripción y orientación hacia el usuario, poniéndole de manifiesto información, explicando y exponiendo datos, como podría ser la procedencia, características del producto, modo de elaboración, etc. mejora la rentabilidad y rotación del producto en el punto de venta, y por ende la retribución de toda la cadena de valor, incluyendo la totalidad de eslabones, desde el origen, hasta el lineal.
* Imagen. Fuente Unsplash – Joshua Rawson-Harris