Ursula Cavero Romaña, natural de Cusco (Perú), Ingeniero en Industrias Alimentarias de profesión, promotora del Aceite de Oliva Virgen Extra y la Aceituna de Mesa de vocación. Actualmente reside en la ciudad de Tacna (Perú), donde en el 2004 inició su experiencia con el mundo del olivo, trabajando para una de las principales empresas productoras y comercializadoras de aceite de oliva en Perú. Y desde hace 5 años se desempeña como Gerente de la Asociación Pro Olivo, organización que agrupa a las principales empresas productoras y exportadoras de aceituna de mesa y aceite de oliva del Perú.
Amablemente Ursula ha respondido a algunas preguntas que nos facilitaran una visión general del sector del olivar, consumo de AOVE y comportamiento del consumidor en Perú.
¿Qué papel desempeña la olivicultura en Perú?
Perú es uno de los principales productores de aceitunas de mesa de Sudamérica. El Olivo fue introducido en el siglo XVI traído desde Sevilla (España), adaptándose rápidamente a las condiciones climatológicas y edafológicas del país, especialmente en los valles costeros del sur, desde Ica hasta Tacna. Una característica común de estas zonas, es que la olivicultura se realiza en zonas muy áridas y representa una de las principales actividades económicas, generando desarrollo y constituyendo fuente de trabajo directo e indirecto en cada Región.
La producción nacional cuenta con alrededor de 30 000 hectáreas, principalmente de la variedad Criolla, tradicional peruana y de doble propósito. La zona de mayor crecimiento se concentra principalmente en la Región Tacna en donde en los últimos años la producción de aceituna ha alcanzado niveles muy elevados, producto de las condiciones climáticas favorables y a la entrada en producción de olivares nuevos.
La mayor parte de la producción se destina a la elaboración de aceituna de mesa. Sin embargo, la industria del aceite de oliva ha tenido un crecimiento sostenido en los últimos años, logrando un incremento en los volúmenes exportados, y en especial mejorando la producción de aceites de oliva de calidad.
¿Cuál es el comportamiento del consumidor?
En cuanto al consumo la tendencia mundial es tener una alimentación sana y saludable, así como la búsqueda de la experiencia gastronómica. Con el aceite de oliva virgen extra confluyen ambas tendencias. A pesar que el consumo de aceite de oliva no es tradicional en Perú, en los últimos años se ha incrementado el mismo, y se estima que pueda continuar aumentando. A estos factores se suma que ha mejorado la economía de muchos sectores, lo que ha hecho posible acceder a precios que presenta el Aceite de Oliva, especialmente en autoservicios, donde el consumidor conoce de sus beneficios para la salud y está dispuesto a pagar por ello. Sin embargo, hay un trabajo aún por desarrollar en la educación o formación del consumidor final acerca de los beneficios para la salud que tiene el consumir aceite de oliva.
Considero importante resaltar que la gastronomía peruana en los últimos años ha tomado gran impulso. Se ha convertido principalmente en motivo de identidad y orgullo de los todos los peruanos, este impulso ha contribuido a incrementar el consumo de aceituna (negra al natural) ya que es ingrediente principal de muchos rellenos o guarnición de muchos platos típicos. Este incremento de consumo de la aceituna ha contribuido a introducir a muchos al consumo de aceite de oliva.
¿Dónde se adquiere? ¿por quiénes, qué formato?
El Aceite de Oliva se comercializa en 3 canales tradicionales. El principal es el canal moderno (autoservicios) donde el formato más vendido es la botella de vidrio de 500 ml, los autoservicios importan directamente aceite de oliva de otros países productores y también comercializan aceite de oliva de productores nacionales. En el canal tradicional (distribuidores y bodegas) el formato más vendido la botella de vidrio de 200 o 250 ml y en el canal HORECA que consume principalmente envases PET de 1 litro y galoneras de 5 litros.
¿Cómo se incrementaría el consumo de aceite de oliva en Perú?
A pesar que el consumo de aceite de oliva virgen extra se ha incrementado en los últimos años, aún es un producto que se segmenta al sector que tiene capacidad adquisitiva. Por otro lado, el Perú produce Aceite de Oliva Virgen Extra de calidad y para incrementar su consumo considero se debería trabajar en tres aspectos:
Primero, se debe educar o formar al consumidor, tener una comunicación clara y eficiente sobre los beneficios que tiene para la salud consumir aceite de oliva. Esta comunicación actualmente es muy baja y no está clara en algunos casos. Es importante mejorar la comunicación empresa – consumidor.
Segundo, difundir las bondades del uso en la cocina del aceite de oliva, romper el mito que existe (muy arraigado) que el producto no es bueno para cocinar o que no se debe freír con aceite de oliva porque hace daño. Se debe aprovechar la coyuntura actual en la que el consumidor está concientizado que debe comer sano y el aceite de oliva es el producto ideal.
Tercero, promover y valorar la producción local de aceites de oliva. Transmitir al consumidor que el Perú es productor de aceites de oliva de calidad.
Al respecto la Asociación Pro Olivo ha venido trabajando en estos puntos, como campañas de promoción de consumo en redes sociales en coordinación con el Ministerio de Agricultura, jornadas de cata de aceite de oliva en Expoalimentaria, principal feria especializada de alimentos del Perú, Foros con expertos internacionales y nacionales, seminarios web sobre la importancia del aceite de oliva para la salud. Así mismo, hemos sido sede del prestigioso concurso Sol D´Oro Heimsferio Sur, trabajo realizado en coordinación con PromPerú. Sin embargo, consideramos que el trabajo realizado debe tomar más fuerza para llegar hasta el consumidor final, principalmente de la capital. El compromiso es continuar trabajando en nuevas y mayores iniciativas en este sentido.
Gracias por la oportunidad de dar a conocer al Perú como país productor de aceitunas de mesa y aceite de oliva.
Saludos desde Tacna – Perú, Ursula.